Los nuevos Discos Solidos

Las unidades de estado sólido se están convirtiendo en el estándar de almacenamiento en un buen número de segmentos informáticos especialmente en dispositivos de movilidad (tablets, convertibles, 2 en 1 o Ultrabooks). Su extensión a portátiles de gran consumo y a ordenadores de sobremesa solo es cuestión de tiempo a medida que aumentan los formatos de uso, mejoran su tecnología y se sucede una constante bajada de precio.




Las ventajas de las unidades de estado sólido frente a los discos duros (rendimiento, consumo, ruido, emisión calorífica) son evidentes, y los inconvenientes frente a ellos (resistencia, capacidad y precio) se han reducido muchísimo al tiempo que han aparecido nuevos formatos que amplían sus posibilidades.
Hace unos meses publicamos un artículo con aspectos a considerar en la compra de una SSD, que hoy vamos a completar con una guía práctica del montaje de una SSD en sustitución de un disco duro. El escenario más claro es el que vamos a tratar, el de un ordenador portátil al que le ha fallado el disco duro o que simplemente queremos mejorar.
El escenario no es único y una SSD es hoy también una apuesta clara para montarla en un PC de sobremesa. Podemos instalarla de forma independiente si no necesitamos una alta capacidad o tenemos un gran presupuesto para comprar modelos de 1 Tbyte (o más), y también en un sistema híbrido que algunos usamos y es perfecto a modo de transición. Es decir, una SSD como unidad principal para el sistema operativo y principales aplicaciones, y un disco duro (o varios en RAID) para almacenamiento masivo.
Fuente: http://www.muycomputer.com/2015/10/01/montaje-de-una-ssd
MR